Despiértame.

Es cuando todo está en calma
cuando yo soy el huracán.
Porque si te dan batalla, luchas.
Si es de vida o muerte, matas.
Pero si el enredo esta en tu alma, explotas,
solo afectando tu capacidad de seguir.
Nadie escucha tus gritos,
todos creen en tu estúpida sonrisa,
y sigues con las heridas abiertas,
deseando no despertar,
o que alguien te despierte de absolutamente todo.