Vas directo a la destrucción, por no haber leído las señales, corazón.

No se cuando es hora de rendire. Te amo con dolor, con el dolor de que nunca jamás cambiará nada. Estamos estancados en este horrible lugar. Con el dolor de ser tu amiga. Con celos, horribles celos, que me tengo que guardar. Con el miedo de tener qe verte con otra y aguantar las lágrimas. Con la duda. Con la pregunta ¿Porque no me diste una oportunidad?. Con el.. ¿Que hubiera sido si...?. Te amo con las apuestas en mi contra. Te amo más cuando debería olvidarte. Te amo aunque juegues, aunque me uses. Te amo aunque te aproveches. Te amo aunque no te guste escuchar. Te amo aunque no hablemos nunca más de esto. Te amo aunque este intentando olvidarte. ¿Cuando voy a dejar de amarte? No se. Porque te amo con locura y con el ferviente deseo de que me des tan sólo una oportunidad de hacerte feliz. La oportunidad de demostrar quién soy. Algo me dice que debo apuntar hacia nuevos objetivos. Algo me dice que no puedo esperarte para siempre. ¿Será la razón, que ha hablado por sobre los gritos del corazón por un segundo?. No se, porque vuelvo a dejarla de lado y a escuchar mis sentimientos confusos. Por eso te amo, y aunque seas tan malo que me hagas llorar, estés con tantas otras mujeres que hasta te olvides sus nombres, ni siquiera aunque estes lejos como la otra orilla del mar, te voy a dejar de adorar.

Mis ojos intentan no mirarte, pero llevo como un imán que siempre me atrae al punto exacto donde están tus ojos.

No te sientas culpable de este amor, yo estoy presa de mis propios sentimientos, de mis propias tonterías, por culpa mia, por haber escuchado a mi estúpido corazón y dejar de lado la mente, el pensamiento, la lógica.

A pesar de todo lo que pido una oportunidad, creo que prefiero estar sola a que me la des por lástima o porque sentís que no te queda otra opción. Mi amor es verdadero, y si no te moví ni un pelo hasta ahora, ya está. No me rindo, ¿eh? Simplemente acepto la cruel realidad de que jamás vas a ser mío.