Metáfora del momento.

Estoy en una habitación; no está mal pero quiero salir, porque me esta cansando. Estoy harta de las mismas paredes de siempre.

La única puerta que encontré me lleva a una habitación fría, humeda y oscura. Demasiado triste para mi.

Por ahora me quedo en esta habitación. Al fin y al cabo, aca estoy bien, abrigada, cómoda y tengo todo lo que necesito.

Seguiré buscando; si encuentro una salida que me lleve a un lugar mejor, más seguro, más divertido y más claro, me voy. (No sin antes, pensarlo dos veces y reconocer el nuevo lugar).
No quiero irme, pero no queda otra. La habitación me expulsa como si fuera ajena a ella. No quiero decir final. No quiero que vos lo digas tampoco. Las paredes se estan acercando entre si, me encierran. Algo hay que hacer, para que esta distancia de kilómetros deje de agrandarse.